Torta de pan ...¿te gusta o no te gusta?

La torta de pan es parte de mi niñez, así como el quesillo de mi viejo y el bizcochuelo o las polvorosas de mi abuelita. Mi mami, Carmen Violeta, la hace y le queda bien rica, siempre me encantó. Con el tiempo aprendí a hacerla de una forma que conserva los olores y sabores de mi infancia en una textura diferente. Desde ese entonces, como sorprende, me gusta hacerla cuando me piden un postre.
Un día que había una comida en casa de Omi y Armando, mis cuñados, le pregunto a Omi lo de siempre, qué te llevo, y me pide un postre. Omi detesta la torta de pan, yo no lo sabía, y me pongo encantada a hacer mi torta de pan. Cuando me entero que no es de sus preferidas, le digo, con cero modestia, prueba la mía y después hablamos. Renuente, pero obediente – habrá quien lea y no lo crea – repito, Omi obediente la prueba y abre los ojos como un par de paraparas, no podía creer que le gustara. La diferencia es que no rallo o licuo el pan, lo corto en pedazos mas o menos grandecitos y la consistencia es otra, es absolutamente diferente.
Puede uno hacerlo con la receta que más le guste. En Venezuela hay gente que le pone harina de trigo (queda más pesada), polvo de hornear y queso blanco rallado. Hay quien le agrega mantequilla o coco. A mí me gusta así:
3/4 de taza de azúcar
1 cucharadita de canela
Nuez moscada
4 huevos
2 1/2 tazas de leche
1 cucharadita de vainilla
5 tazas de pan duro
1/3 de taza de pasitas
Bato los huevos, con la leche el azúcar, canela, vainilla y nuez moscada. Agrego el pan cortado en cubos grandes y lo dejo allí hasta que todo el pan esté impregnado con la mezcla. Si el pan está muy seco puede necesitar más líquido. Agrego un poco más de leche azucaradita si hace falta.
Cuando está bien remojado el pan, agrego las pasas, mezclo bien y al molde o a los moldes si me da por hacerlo individual, como hoy.
Va al horno a 350º por media hora o hasta que esté dorado arriba y firme al tocarlo. Debe quedar húmedo.
A veces lo sirvo con helado de canela o con una salsa de whisky.
Salsa de whisky o ron o cualquier licor que a uno le guste
1 taza de crema de leche
1/2 cucharada de maizina
1 cucharada de agua
2 cucharadas de azúcar impalpable o nevazúcar
¼ de taza de whisky
Mezclo el azúcar con el whisky, que se disuelva bien y lo dejo aparte.
Coloco la crema en una olla pequeña y la llevo a fuego medio hasta que empiece a hervir. Mezclo el agua y la maizina y lo agrego a la crema, lo hago así para espesar sin utilizar amarillos de huevo. Lo mantengo en el fuego, moviendo constantemente hasta que hierva. Lo retiro, y lo agrego al azúcar con el whisky y mezclo bien. Pruebo a ver si me parece bien de dulce o de whisky. Cubro con envoplast en contacto con la salsa y dejo que se enfríe, a temperatura ambiente.