Fresas de Florida

La semana pasada estuve en Tampa, FL con Omi mi cuñada. Llegamos a una linda casita que tienen sus padres allí y el anfitrión fue Martin, su padrastro.
Supe que Omi tenía que viajar y me 'colié'. El viaje terminó siendo de compras para Luís Gabriel, mi nieto. Y lo increíble es que no fui yo la única que enloqueció metiendo cosas en los carritos. Omi como que se dejó llevar de mi locura primo-abuelística, y entre las dos le compramos a Luís Gabriel unas cuantas cosas lindas.
Fue muy agradable, fui tratada a nivel de Reina por Martin y Omi, y terminé creyéndomelo, así que compré como si fuera una Reina… y ahora tendré que trabajar como plebeya para pagar las tarjetas de crédito… pero sarna con gusto no pica…
Martin es un excelente cocinero, comimos delicioso y disfruté muchísimo conversando con él sobre recetas de Slovakia - su tierra natal – de cómo es y fue la vida por allá, de ingredientes y gastronomía en general. Todo esto cada noche mientras él cocinaba.
Coincidimos con el Florida Strawberry Festival y Martin nos llevó a Plant City a comer Strawberry Shortcake. Paramos en Brandon Farms a comprar fresas. El tamaño de las fresas es más que gigante, al morderlas son extra – extra jugosas, si uno se descuida un poquito te llenas del jugo y, puedo decir sin exagerar, que son las fresas más dulces que he probado en mi vida. Martin compró una caja tan grande que juramos era imposible comérselas todas, y Omi y yo lo comentábamos sin parar de comer!

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De allí nos fuimos raudos y veloces a un lugar donde venden Strawberry Shortcake. Mientras Martin hacía una larga cola para comprarlos, nos dijo que fuéramos a mirar. En el lugar no solo venden Strawberry Shortcakes de todas las formas, con helado, con crema, más gigantes unos que otros, también venden productos frescos. Allí me tropecé con estas cebollas que se llaman Strawberry Onions. Estas cebollas – de acuerdo a lo que conseguí por Internet – son tipo Vidalia, dulces y caras. Cada una cuesta 89 centavos de dólar. Los 'freseros' las plantan en las orillas de los campos de la fresa, y es por ello que se llaman Strawberry Onions. No las probé, pero parece ser que son tan dulces que pueden comerse crudas, morderlas como una manzana.
En la noche para la cena - ligera porque el Strawberry Shortcake era tan grande que no fue posible terminarlo - Martin preparó una ensalada de pollo con fresas y vinagreta de fresas. Ñumiiii… Qué rabia me da, es que copié la receta en un papelito y la perdí. Bueno, será pedírsela a Martin de nuevo. La receta que sí copié y tengo es de un pollo al estilo de Slovakia que se llama Kuraci Páprika’š. Esta receta la colocaré en el próximo post. Sin fotos!, que inutilidad!!! Pero casi que no importa la foto, el pollo es espectacular.